Sabéis que durante 28 años que llevo trabajando como profesional, en la terapia con niños no he necesitado más de una o dos sesiones?
Si a un niño le ofreces un ambiente de aceptación, cariño y respeto, os aseguro que enseguida se abren. Los niños son directos, sinceros y sin filtro, no necesitan resistencias mentales, ni ocultar, aunque sea inconscientemente, algunas cosas; tampoco llevan a cuestas la mochila que llevamos los adultos. Por eso resulta bastante más sencillo trabajar con ellos. Si son muy pequeños, ni siquiera necesitan venir a terapia. Basta hablar con los padres, o incluso con tan solo con uno de ellos.
Un niño sin problemas, que es lo que toca, siempre se convertirá en un adulto amoroso y con una Buena Autoestima y no en un adulto roto.
Es maravilloso cuando nos esforzamos en crear un mundo mejor para todos, dado que la sociedad está llena de personas con baja Autoestima, que por eso mismo nos pueden dañar, porque arrastran heridas emocionales notables desde su infancia, que les impidieron desarrollar una buena Autoestima.❤️🫂💖🌹